Hay un poco de milonga en todo esto del mundo emocional.
Muchas mentes opinando, pocos cuerpos sentidos.
La vida es exclusivamente emocional, desde que la física muta a química hace miles de millones de años.
Desde que el primer protón se encuentra con el segundo protón y comparten a sus hijitos electrones para vincularse.
Desde que el hidrogeno se convierte en vida en forma de carbono y lucha por la supervivencia en Gaia. Un entorno lleno de peligros donde nace la emoción básica de subsistir , de mantener la existencia.
Esa esencia grabada en nuestra genéticas emerge, se hace celular , orgánica, evolucionando hacia una complejidad de respuesta a los estimulos que se plasma en un sistema nervioso que culmina en el coordinador cerebral, cuyo máximo exponente es el neocortex.
Este neocortex es el verdadero problema de la toma de decisiones que comenzó con Descartes y su puta dualidad cuerpo mente.
La fisico quimica celular orgánica de respuesta llega a las puertas del neocortex mediante un puente, una liminalidad denominada giro cingulado. Sí , el purgatorio entre lo consciente y lo incosnciente, ese limbo que mediante aprendizaje desarrolla la esencia cognitiva.
Lo emocional nace de la interacción con el entorno, en forma de ambiente o en forma de otro ser vivo. Es el motor de la evolución cognitiva.
Hasta 1781 ese motor tenía la función de optimizar la cognición estratégica , aquello que nos permitia conquistar el entorno para asegurar la existencia. A partir del 1781, la cognición evoluciona hacía lo receptivo pues no hay nada que conquistar sino lograr fusionar cogntivamente despertando el sueño de la separatividad…el nosotros de la mutación del 2027.
Nosotros como interacto evolutivo nos la cascamos buscando los dimes y diretes de la utilidad o inutilidad de la emoción como toma de decisiones.
Por lo pronto el DH confunde a la mente con su dualidad que se engancha como malware en nuestra corteza cerebral generando un ruido de fondo que nos impide escuchar al cuerpo, sí ese sensor kósmico pre giro cingulado.
La matriz de 9 centros tiene distintos tiempos de respuesta al desafío con el entorno, ese desafío que es el motor emocional.
No hay más desafíos que la emociones, para todos.
La mente entra a crear esquemas de respuestas basados en mil premisas, pero casi todas soslayan la principal. identificar el proceso de metabolización celular, organico y cogntiivo de nuestro cuerpo ante el desafío de la interacción
Nuestro cuerpo gráfico nos da un mapa de como es esa metabolización, más o menos rápida, más confusa para algunos o incluso incomprensible para otros sin un tiempo orgánico claro de respuesta.
No es la simpleza de fifty emocional fifty no emocional. Es más rapido o menos rápido o simplemente darse cuenta de lo esencial.
Y lo esencial es que hay gente que puede responder de inmediato, gracias a su mecanismo celular y orgánico sacral inmunitario, porque peligra su integridad en el ahora y otros que simplemente se tienen que joder y esperar al desafío de que las cosas sucedan,debido a su neblina bioquimica que le recorre el cuerpo como marea lunar y aceptar que la toma de decisiones es un invento de la mente, para que la gente venda cursos de inteligencia emocional.
Sí , al final eso de abrir el corazón es darse cuenta que no tenemos control de nada y cada vez menos y que ,uno de esos que dice el DH que es emocional nunca decide nada y que solo es dar alpiste a la mente con sus miedos y ansiedades para tenerla contenta hasta que la vida trae en ella misma la respuesta.
Algo fundamental de reconocer especialmente para los proyectores.
© Alf Gauna, 2024
Alf Gauna 