Grinch

Se acerca el fin de año homogeneizado, pero aún navidad.

No me gusta ni el folclore ni el costumbrismo, really, es de siete centros.

Si me apuras casi prefiero los ritos paganos magentas de 5C que la parafernalia azul de patrias o independentismos horteras, las comidas de empresa de los competitivos naranjas o los ecorituales verdes. Ahora, ya, incluso, me dan pereza las constelaciones sistémicas amarillas y lo holistico integral turquesa.

Lo Post-turquesa se debe quedar en la nada solitaria de verlas venir y virgencita que me quede como estoy. Algo así, como pasar desapercibido en los whasssapas de colegas y familia.

Tengo un décimo de loteria que me regalo un amigo, bueno que me obligo a aceptar. Creo que son 300.000 pavos por décimo…miento son 400.000, más que suficiente para dejar el DH , las Claves Genéticas y todas estas chorradas de dimes y diretes de propósito con las que intentó sobrevivir y esconderme en la Segunda Fundación a montar una libreria en la que a ser imposible no venga nadie a comprar o dar por culo a lo Notting Hill.

Quizá suene la flauta.

Yo siempre he gestionado la Pirámide de Maslow al reves. Sí hay encarnaciones para todo.

Realmente, no hay jerarquias. Para unos es más importante la realización y el propósito personal, para otros el sexo y del dinero para sobrevir en homoestasis con un entorno VUCA.

Es como lo de Freud y Lacan. Uno con su pulsión biológica , el otro con su pulsión discursiva.

Siento que es un mixing de ambas. De alguna manera es una pulsión kosmica que usa la biológica en discurso con el entorno.

Ves que la Psique se va a tomar por culo, no pinta nada. Hasta te diría que Jung murió para mi.

Tanto arquetipo sodomiza el ser, te hace soñar con un ego mesiánico que cree que puede cambiar el entorno, e incluso que sobrevivirá en forma de alma.

Sí, mi cuerpo en mi entorno correcto permite un discurso libre y mutante, a través de una tonta mente que simplemente sea el ventrílocuo de la experiencia.

Ayer veía, una familia transgeneracionalmente completa, que llevaban todos cuernos de reno navideños, no se si era alegoría situacional, ET´s disfrazados para pasar desapercibidos o la sencillez que yo no tengo para disfrutar de lo que sea.

Mi tiempo de exposición a las Hordas Zombies es cada vez menor, pues mis noches después son zamoranas.

Miles de egregors del astral me invaden pidiendo por favor ir a la luz.

Un poco como el fantasma de Ghost que habitaba en el metro y asustaba a todo dios para divertirse. El pobre solo tenía miedo pues no entendía lo que le pasaba.

Decidamente hoy 22 se acaban para mi las Navidades, saldré por el barrio a estirar las piernas y a mover el corazón, no para que se abra sino para que no se pare.

Un mes hasta que empiece el año Nuevo del Rave, después dios dirá.

Me investiré con los hábitos de Grinch Post-turquesa a la espera de las campanadas paganas de fin de año del rave.

Mientras sobreviviré con mi auto-nutrición creativa y soñando con amores transgalácticos.

© Alf Gauna, 2024