En las Crónicas de Riddick la raza de los Necróferos sometían a las tribus que conquistaban de la galaxia.
Los vencidos eran obligados a aceptar que el líder de los Necróferos abduciera su alma para vivir en el submundo como conversos semimuertos sin alma o morir fisicamente pero quizá con la fe de un alma eterna.
Peregrinaban al paraíso del subuniverso convirtiendo la vida breve con alma en eternos semimuertos sin alma.
Yo soy un nitófilo, me da placer la irrealidad utópica de la ciencia ficción o quizá no tan irreal.
El proyector realmente es un poco como ese Lord Mariscal de los Necrófenos, sí el que abduce sacros para existir.
Vive en el subuniverso eterno del Ser, en una semimuerte latente consciente, el limbo del testigo, la liminalidad interfase ello-ego. sí, la continua angustia del Dasein.
Escribo para ella.
Esto es un carta de amor con voyeurs kósmicos.
Erotismo necrófilo.
Lo muestro “por si”.
Sí, “por si”, la “vibra”, resuena en algunos otros.
Me permito el strip-poker de la fuerza vital desencarnada entre ella y yo, testigos que tiernamente se acarician para sobrevivir en el purgatorio más allá del bien y del mal.
Oía una entrevista al Pitzal amiguete del Rudd que de alguna manera decía que el DH y las Claves Genéticas no servía para nada. No lo decía literal, pero hablaba de un acceso directo.
Nada nuevo que los místicos no hayan dicho ya.
La esencia es la diferenciación en el despertar de cada quien.
Hay que identificar direcciones kósmicas para acompañar, si acompañas claro.
Papa Nóel existe realmente para ese niño ilusionado.
Entender lo Uno, el No Dos, existe para maybe 1% ?
Sentir que sólo estamos para maravillarnos en el sentir del mosaico infinito de lo múltiple en el oceano del uno, es para dos o tres lobos esteparios.
Sí, amor mio.
It´s so easy.
Que el YinTao sienta y se maraville.
No hay más.
Permitámoslo, sin lenguaje, sin estrategias.
Recibir, sentir y maravillarse alrededor del fuego en el calor de nuestra compañia
La sinergia del dos en la fusión de nuestros no-dos.
©Alf Gauna