Pero no
hay nadie
a quién amar.
Sin despertar
no hay amor,
solo la eterna
noria de
demostrar.
El amor
es posturquesa
cuando
el yo
se funde
en el nosotros.
Cuando te
duele el
no ser
del otro.
La pertenencia
óntica
a la misma
carne,
a la misma
fuente.
Yo
se
lo
que
es.
Muero
cada
noche
de amor
viajando
en el astral
del otro.
Despierto
abrumado
por la belleza
que es
abandonada
cada mañana
por las obligaciones
del sobrevivir,
del demostrar
que vales.
No, pls,
no me
lo demuestres,
solo muestrate,
yo se adorar
lo que
es
de lo que
no es.
Si tu bailas
desnuda,
despojada
de obtusos
ropajes,
yo amo.
Amo
y dejo
de escribir
en contra
del amor.
Empoderate,
desnuda,
sin trampa,
el esplendor
de tu forma
más allá
de lo moral
o lo inmoral.
Sé lo
que es
amor.
pues duele,
se siente
si no duele,
no,
no es,
lagrimas de
cocodrilo
del ego.
El único
propósito
de mi vida
es dejar
que me
duela
todo.
Morir,
para dejar
de amar.
Descansar
de sentir.
Fundir lo
orgánico
en la paz
de lo inorgánico.
Muerto el
dos,
viajo
en la eternidad
del no dos.
Sí,
yo
se
lo
que
es el
amor.
Morir
para
dejar
de
sufrir
por
el
puto
sueño
de
la
separación.
Sin besos,
sin lenguas,
sin pieles,
sin coños
ni pollas,
sinsentido,
dormidos,
como
atemporales
amantes
kósmicos
de Teruel.
©Alf Gauna, 2024
que Así Sea el Amor
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