créditos foto portada : ©JovianArchive-Andrea Reiki
Hoy no toca poesía, espero que me perdones love of my life.
Igualmente seguiré hablando de amor.
Decía el Tesla que la mejor manera de describir el universo es a través de la vibración.
Yo puedo mirar el kosmos de muchas maneras, muchas perspectivas.
Puedo usar los campos cuánticos y sus excitaciones que son las partículas, puedo mirarlo como un conjunto de cosas sin conexión evidente que intereactuan mediante encuentros fortuitos o a distancia a través de fuerzas fantasmasgoricas, puedo reconocer esa malla espacio-tiempo eisnteniana donde flotamos todas,todos y todes e incluso puedo soñar que ese espacio es una fuente inagotable de energía pues esta inundado de fluctuaciones cuánticas que emergen en forma de liminalidades protonicas con una masa tangible.
Si te aburres mira este link…
Hay otra forma de mirar menos conocida que son las ondas estacionarias de materia. No me voy a poner a explicarlo.
Quedemonos solo con eso: ondas.
Cuando estudias Mecánica de Ondas en Físicas será por algo no?.
Sí, parece que las cosas vibran y curiosamente rotan y orbitan.
Hay algo que se repite cada cierto tiempo.
Incluso el tiempo no es necesario si no miramos con la mente y miramos solo con el corazón.
Los relojes no miden el tiempo comparan frecuencias.
El tiempo es mente.
El amor es relación de frecuencias propias.
Si se para el corazón , el cerebro no respira.
Claro, si tu no vibras o vibras poco, no existes, si no hay amor por ti mismo, nunca nadie te encontrará, solo quizá el karma de lo homogéneo o la noria del imperativo genético.
Somos diapasones de quarks con una frecuencia propia característica que se relacionan por resonancia-dharma-fractal o disonancia-karma-espacio en el mar de las ondas estacionarias de materia de la existencia.
En nuestra carta gráfica del Rave podemos encontrar dos diamantes que una vez que vibran con su frecuencia propia atraen el dharma del amor fractal sanador.
La Presencia inscrita en la Caja Lunar y Planetaria de Diseño polimorfea por resonancia sanadora los cuerpos de todos aquellos con los que nos relacionamos.
Si, nuestro amor y respeto por nuestro cuerpo eleva nuestra frecuencia propia y hace que emitamos amor a través de las diagonales de Marte sanando al otro.
El Diamante de la caja lunar y planetaria de Personalidad cuando aprende a gestionar sabiamente lo mundano transciende lo personal y enriquece de cognición experiencial mutando las bases de Marte del testigo kósmico.
Todos son ondas,vibración, rotación y orbitación y cuando alcanzas tu frecuencia propia todo es un arcoíris de colores dharmicos resonando.
La disonancia, el karma y la transferencia…la víctima muere.
©Alf Gauna, 2024
Alf Gauna 