Somos una especie profundamente mutativa. Es algo obvio cuando miras a los circuitos individuales de la carta gráfica.Es la vida; es donde la evolución sucede;es un proceso mutativo. No es un proceso predeterminado en el sentido que tu puedas prever que va a suceder a continuación. Hay una dirección y un movimiento que nos ha movido desde el principio. Y según nos movemos mutamos.Por tanto, todo esta siempre listo para cambiar.
Pero cuando hablamos sobre el libre albedrío debemos hacer una importante distinción: la voluntad como energía, la cual la libera nuestro centro del corazón* y el concepto filosófico de libre albedrío. La voluntad es una poderosa energía que proviene de nuestro centro del corazón y el libre albedrío es un mito.
Los seres humanos en su gran vanidad piensan que tienen libre albedrío. No lo tienen porque todo lo que piensan, dicen o hacen se inicia en las áreas grises del cerebro, medio segundo antes de que seamos conscientemente atentos en nuestro neocortex. El libre albedrío es una ilusión. No somos creativos sino reactivos. El libre albedrío implica que controlamos nuestros procesos pero no, no lo hacemos. Los seres humanos estamos aquí para manifestar conciencia en la forma, pero no tenemos control sobre nada.
En nuestra capacidad para transcender, en términos de nivel de conciencia, se establece nuestra profundidad vanidad, una vanidad que supone que no somos así,pero que tenemos el control.
Sólo porque pensemos o solo porque podamos soñar no significa que podamos elegir.
Esta es una de las cosas con las que tienes que enfrentarte, porque si no asumes que no hay “elección”, nunca serás capaz de rendirte. No hay nada de que encargarse, nada.
La expresión “libre albedrío” (free will) es una contradicción en si mismo, porque el poder de la voluntad (will-power) siempre se dirige a una meta. Con lo cual nunca puede ser libre. Esta relacionado con algo que quieres tener o conseguir.
Somos el pasajero, no el conductor. Suelta “las manos del volante” y disfruta del viaje.
* nota del traductor:
El centro del corazón o del ego conlleva muchas interpretaciones culturales y académicas que no se ajustan realmente a su descripción según el diseño humano. Se distorsiona, aún más, con el concepto de libre albedrío (free will). Will como voluntad, como energía o poder para conseguir algo es su interpretación correcta como describe Ra en el escrito. Quizá sea menos confuso denominarlo el centro de la voluntad.
© Traducción Alf Gauna,2018
Alf Gauna 