Las perspectivas del hombre han evolucionado con su conquista del entorno.
Es evidente que el desarrollo técnico ha sido la base esencial para nuestra superviviencia y para el avance de las distintas civilizaciones y culturas.
Esa visión inicial egocéntrica necesaria para la supervivencia de nuestro cuerpo se dio cuenta que agrupándose en tribus le añadía mayores probabilidad para sobrevivir.
Este etnocentrismo nos ha acompañado desde hace unos miles de años. Realmente es casi el 80% de la visión imperante en la población actual.
Desde hace no tantos años nos acompaña una forma de ver el mundo más global, mundicéntrica. Ser conscientes de que los problemas de los humanos en Gaia no se resuelven por etnias sino entre todos.
Suena bien, pero los desequilibrios económicos y las ideologías egocentricas y tribales están venciendo a ese otro 15-20%%. Incluso, muchas de las veces, esta propia ideología global, al intentar imponerse, se autodestruye.
Hay otros poquitos que no llegan, ni de coña, al 5% que se dan cuenta de que el humano no es el centro de la creación y que el entorno no se delimita a nuestra vilipendiada Gaia.
Sí, ya los egipcios hace miles de años miraban al cielo y construían pirámides alineándolas a las constelaciones. Pura intuición, o información ET , jejeje, que ahora con la técnica podemos razonar. La astrología también ha sido utilizada para describir la influencia de los astros en la psique. El problema es que siempre se utilizaba desde la estrategia para alimentar ese egocentrismo o ese etnocentrsimo para empoderar egos y civilizaciones. Nunca era una visión cosmocéntrica genuina.
Tenemos ahora a esos ricos, ellos se llaman visionario, para mi una conforman una especie de asociación maligna a lo Espectra de James Bond, donde el egocentrismo utiliza el cosmos para salvar su culo. Nos muestra un cosmos salvador a los que sólo unos pocos, con muchos dólares, podrán acceder.

“El ego “ y” lo etno capitalista” utilizando “lo mundi” y “lo cosmo”, el Wa explotando el Penta, como siempre ha sido y será.
Poca gente tiene una visión cosmocéntrica genuina. Algunos firkis se alejan un poco del sistema solar y se alinean galácticamente, eso sí, para justificar sus anodinas vidas, con patrones cada vez más complicados y que , al final, te impiden vivir la vida , porque tu mente siempre está en Marte o en, no se qué, Kin 55.
Casi Nadie sale de la Vía Láctea.
Ni Asimov ni Star Trek, bueno, quizá algunos con viajes psicodélicos después de un porro de LSD o lamiendo sapos.o setas.
Yo por eso pongo la K, no soy ya Cosmocéntrico sino Kosmocéntrico, me voy de Lanikea hacía el Gran Atractor.

Allí donde los besos saben a besos, donde esa chica que me atrae, no me viene ni por Venus ni por las Pléyades, ni por el karma transgeneracional.
Allí donde todos somos No Dos.
Allí donde somos lo que somos pues no somos.
Allí donde sólo estamos en el instante eterno del ubicuo espacio vacío.
Allí donde cago en la paz del espíritu.
©Alf Gauna, 2022