Loo perplejo
la vespertina poesía
que acontece.
Alabo la serendipia
creativa a la muerte
del Lucero del Alba
en su taciturno ocaso.
Lucifer, serafín
vilipendiado por la
luz, retoza con la
bella aldonza,
transmutado en
barrigudo Sancho.
Su señor, desde
su castillo
celestial,
masturbase
como si regio
coito
presenciase.
Gira
y Gira
Il Mondo
como molino
manchego
en busca del
arca perdida
del deseo
y de la pasión.
El manco
mecanografía
en inconexos bits
digitalizando
su alma
de naufrago
de absurdos
imperios corsarios.
Anglicanos,
Protestantes,
Ortodoxos,
Católicos,
milongas de
marcas
para justificar
adulterios,
sextercios,
pederastias,
incluso,
santerias
transgénero.
Degluto a Santa
Teresa como
Yema abulense
en busca
de una sobredosis
de diabetes tipo 2.
En “unio mystica”
con el éter creador
eyaculo, en una ágape
de fuegos artificiales,
trillones
de neutrinos
sin rumbo,
En la lontananza
la Virgen del Carmen
desparece
lentamente
guiando
como faro redentor,
la “Stella Maris”
que intenta
llevarte
a buen
puerto.
Allí donde,
para más
inri,
“requiescat
in pace”
en la lugúbre
soledad
de la hiel
romana
del wa.
©Alf Gauna, 2023