Sueños rotos por una mente condicionada.
Corazones “partios” por las circunstancias.
Cuerpos que revolotean en la dimensión
del cancaneo del amor y del abandono.
Bailando y jugando la ruleta rusa de la pasión
las mentes buscan la lógica de la huida y
del sinsentido kósmico de lo nuestro.
El amor se solidifica en un hielo de indiferencia
en una especie de metadona
donde la palabra de amistad hace de
calentamiento global.
Allí donde no se siente,
sólo se piensa.
© Alf Gauna, 2020