Sí, siempre pasan de largo.
Mis sentimientos son
los últimos de la fila.
Quizá,
en un mañana
o why not,
en un después.
No importan,
la bioquímica pasa.
Vendrán otros distintos
que, quizá,
nos gusten
más
y te
permitamos
sentirlos
y , quizá,
compartirlos.
Pero, porfa,
deja
de
dar
el coñazo,
no sabes como
nos cansan.
La verdad,
es que no te enteras,
nos importan un huevo.
Además, ya sabes,
el humo escampa y
la claridad
correcta y
homogeneizada
llegará.
¿Sabéis?
que os den
por culo
a todos.
Sin más,
sin acritud.
Poesía
apocalíptica
del 27,
sí,
del 2027,
la nueva generación
de lobos solitarios.
Allí donde el
Fénix Durmiente
despierta
y ”Platero y Yo”
mueren.
La mutación
de
9
centros
de
Don
Juan
Ramón
Jimenez.
©Alf Gauna, 2021