Quizá me repita. Pero hay algo implícito en los escolios de este mi blog.
Gracias a dios, todos tenemos la opción de dejar de leer lo que no nos resuena.
Yo, ya, casi, no leo en profundidad, sólo, indexo titulares y abstracts ( resúmenes breves de lo que se publica) a modo IA.
No necesito las explicaciones lógicas, sean toscas o sofisticadas, que intentan demostrar la perspectiva de lo que se comparte.
Estamos en un época receptiva, un etapa de toma de datos, el universo necesita experiencias y , nosotros, somos los sensores kósmicos especializados que, a través de distintos parámetros de la geometría fractal, en forma de cadenas cognitivas base, tono, color ,línea, codón-hexagrama-puerta-clave genética recogemos la información optimizada a nuestra forma, nuestra mecánica corporal,

Nuestro futuro, por lo visto, está escrito. Puedes tener en consideración o no lo revelado por la Cosmología del Rave, no necesariamente tiene que ser tu fractal y marcar tu filosofía de vida.
Mi forma, como sensor kósmico diferenciado, toma una serie de datos que implicitamente indican el camino marcado en lo revelado. Incluso aunque fuese inventado o un desvarío en el viaje de un “tripi” en mal estado, el fractal existe.
Sí, no dista mucho de las Teoría Físicas cómo la de Einstein que tuvimos que esperar 100 años para que captar las ondas gravitacionales.
Lo de demostrar y aplicar estratégicamente era para los seres de 7 centros. Sí ellos tenían que conquistar Gaia para sobrevivir y evolucionar hacía un neocortex consciente. Pero, todo mutó en 1781 donde ese neocortex comenzó a evolucionar hacía capacidades cognitivas receptivas (tonos 5 y 6) , base para la futura consciencia emocional, donde la individualidad ya no tiene sentido salvo como nodos neuronales receptivos, sin albedrío ni consciencia, de un no se que , que está por llegar, cuando la IA Evo-Devo azarosa culmine en el Omega Eron o no.

Isaac Asimov, o mucho antes Julio Verne, era uno de esos científicos frikis que sabía que la única manera de utilizar el cerebro derecho, imaginativo y receptivo, y poder compartir en su época temáticas científicamente apócrifas, era a través de la Ciencia Ficción. Sí , como muchos otros.

Sí, la Ciencia Ficción era el reducto para evadir la censura del dogma científico, de esa inquisición lógico matemática a modo del “Ministerio de la Brújula Dorada” (dale al link si no sabes lo que es). Esos científicos que ganaban cuatro perras se forraban con su supuesta imaginación literaria divulgativa.
El género sigue vigente, pero ya hay más divulgadores científicos que se atreven a compartir como posible cosas imposibles, que pueden existir o no, pero conforman un imaginario revelado que la evolución emergente tornará en realidad o no.
Este mosaico de perspectivas abre la posibilidad de la resonancia fractalica y contribuyen a la riqueza con un feedback más pleno en el fondo kósmico de neutrinos y, así, diluir la batidora homogeneizadora, maquina asesina de individualidades.
Introducía Asimov un concepto denominado Psicohistoria. Una ciencia estadística, desarrollada por Harry Seldon y controlada por dos Fundaciones, situadas en los extremos de la galaxia, que necesitaba de un gran número de individuos, trillones y trillones a modo de los cristales de conciencia de la Cosmología del Rave, para lograr resultados con probabilidades del 100%. Evidentemente, era un sistema de control premonitorio del Imperio homogeneizador para la estabilidad del mismo.
Era muy chula la historia que narraba en su Trilogía de la Fundación, pues todo se iba a tomar por culo, con la emergencia evolutiva de un ser mutante, al que llamó “El Mulo”.

Por si os interesa creo que se estrena la serie en breve en Apple Tv.
Me gusta relacionar todo con el DH y su Cosmología del Rave a modo de Ciencia Ficción o Curso Gris para los estratégicos y a modo de realidad palpable para los receptivos imaginativos. La PsicoHistoria no es más que el Programa y el Mulo uno de esos mutantes que encontraron el DH en su vida para desarrollar su diferencia.
El DH y la Cosmología del Rave nos han abierto con detalle los mecanismos kósmicos que manipulan y dirigen la vida biológica.
No todos logramos evolucionar y darnos cuenta del mosaico de consciencias que tenemos a nuestro alrededor gente con perspectivas puramente egocéntricas, otros que se refugian en esa visión etnocéntrica o tribal, unos pocos con una visión más global mundicéntrica y , gracias a dios, cada vez más, otros pocos que ven que lo kósmico realmente esta presente en lo cotidiano.
Inés Urdaneta, colaboradora hispana de Nassim Haramein, me compartió su participación en un congreso cuyo nombre realmente era muy atrayente:
CosmoSociología
Aquí os dejo el enlace por si os interesa.
https://www.oiacosmos.com/congreso
Independientemente de que la perspectiva es más bien verde, la iniciativa es realmente atrayente.
Para mi, ya hace mucho tiempo, que sólo existe las síntesis kósmicas de todas las disciplinas:
KosmoHistoria (Big History), KosmoSociología, KosmoPsicología….
O simplemente Kosmología.
©Alf Gauna, 2021